El calentamiento global es un problema que afecta y sigue generando preocupación en gran parte del mundo, sobre todo entre la comunidad científica. Uno de los temas que más ha centrado la atención es la posible desaparición de los arrecifes en la mayoría de los océanos, debido al aumento de las temperaturas. Pero podría existir una solución, resguardada en el fondo del Mar Rojo.
¿Podrían los corales del Mar Rojo salvar los arrecifes del mundo? La respuesta está en proceso y es parte de una investigación que se desarrolla en la Universidad del Rey Abdalá, ubicada a orillas del Mar Rojo. Una institución de 3.600 hectáreas y un presupuesto asignado de 10.000 millones de dólares.
Los corales son muy sensibles al calor. Un aumento en la temperatura de los océanos de 2°C podría hacerlos desaparecer. Estos animales, que por años han sido vistos como elementos vegetales o minerales, son el refugio de cantidad de peces durante gran parte del día, aunque sobre todo en las noches.
A pesar de su sensibilidad al calor, los corales que se encuentran en el Mar Rojo muestran una actitud distinta, parecen adaptarse muy bien a las temperaturas más cálidas y a la alta salinidad. Dos condiciones que podrían tener la mayoría de los océanos del mundo como consecuencia del cambio climático, según los científicos.
“Las condiciones naturales del Mar Rojo, como las altas temperaturas y una fuerte salinidad, se parecen mucho a como nosotros pensamos que será el resto del mundo con el calentamiento global. Entonces, entender en detalle cómo se adaptaron estos organismos a estas condiciones nos ayudará a evaluar las posibilidades que los otros océanos tienen para adaptarse también”, dijo Michael Berumen, director del departamento de biología y medio ambiente de la Universidad.
Biólogos marinos, científicos e investigadores de lugares como Alemania y Estados Unidos se encuentran estudiando con gran interés los corales del Mar Rojo. ¿Su objetivo? Encontrar ese secreto que revele las capacidades de adaptación que ha tenido este ser vivo por años. Esa información podría ser importante para ayudar a los océanos en su proceso de adaptación de aguas más cálidas.